Querida comunidad educativa,

Les saludamos fraternalmente y deseamos que la paz y amor de Dios abunde en vuestras vidas y familias. Como capellanas del Centro Educacional queremos compartir con ustedes, un mensaje que nos invita a reflexionar sobre la importancia de la fe y la espiritualidad en nuestra vida cotidiana. La espiritualidad no es solo un aspecto de nuestra vida, sino la base sobre la cual construimos nuestro carácter y nuestras decisiones. Al cultivar una relación profunda y sincera con Dios, aprendemos a vivir con integridad, amor y compasión hacia los demás. Estos valores son esenciales para ser no solo buenos estudiantes, sino también buenos seres humanos. Hoy nos enfrentamos a un mundo lleno de desafíos y cambios constantes, donde es fundamental que nos aferremos a nuestra fe en Dios, quien es nuestro guía en todo momento. La Biblia nos enseña que «todo lo puedo en Cristo que me fortalece» (Filipenses 4:13). Esta promesa nos recuerda que, independientemente de las dificultades que enfrentemos, siempre podemos contar con el apoyo y la guía de nuestro Señor. Él nunca nos abandona y siempre está dispuesto a ayudarnos a superar los obstáculos.

Les animamos a que busquen siempre la presencia de Dios en sus vidas, no solo en los momentos de necesidad, sino también en los momentos de alegría y éxito. Agradezcan a Dios por sus bendiciones y confíen en Él en todo momento. Recuerden que nuestra fe nos da una perspectiva eterna, nos ayuda a ver más allá de las circunstancias temporales y a confiar en el plan perfecto de Dios. Mantengan sus corazones y mentes abiertos a la guía del Espíritu Santo y no duden en compartir su fe con los demás. Juntos, como comunidad educativa, podemos apoyarnos y edificarnos mutuamente, creciendo en nuestra relación con Dios y fortaleciendo nuestra fe día a día.

Que Dios los bendiga abundantemente y que su luz brille en cada uno de ustedes, guiándoles siempre por el camino de la verdad y el amor.

Con cariño y bendiciones,